domingo, 28 de enero de 2018


Hay que cantarle a la Serena,

aún siendo mudos,

a fuerzas de estornudos…

valdrá la pena.


Hay que cantarle a la Serena,

mirarle la cara,

disfrutar de sus mañanas,

uniendo  faenas.


Hay que cantarle a la Serena,

sentirla nuestra,

pintarle los labios…

digna maestra.


Hay que  cantarle a la Serena

antes de que muera.


JM Proyecto







No hay comentarios:

Publicar un comentario