Cuando te miro, Serena…
y me sonríes;
cuando te callas
y no me hablas;
cuando gritas y gritas,
con tu garganta;
a ti me entrego,
en cuerpo y alma;
eres dama que reclama,
mi entero amor;
dulce señora que a todas horas,
reclama atención.
Bis…los dos últimos versos.
JM
No hay comentarios:
Publicar un comentario