Aprenderemos a ser nosotros, cuando dejemos de ser… yo. Si nos rodea la
libertad, nunca estaremos solos; no es la vida quien vuelve la cabeza, sino
nosotros quienes la giramos, pensando… en nosotros mismos; al fin y al cabo, somos
quienes más nos conocemos.
Admitir noes y noes, no es sino cierta falta de compromiso hacia un
escaparate eterno que nos rodea y no festejamos. ¿Dónde quedó el sí, perpetuo;
el respeto y la solución? ¿Dónde la vida, llena de vida, llena de …; amor, sí
de amor, por qué no?
Por qué cuesta tanto festejar esa risa, que de prisa,
se presentó.¿A quién hacemos mal?. A nosotros mismos, nada más.
Tengan un poco de piedad,
con el fin de esta historia,
acudan a la memoria
y disfruten la fiesta en paz;
no hay como mirar…,
el paso del tiempo,
otrora momento,
ahora bienestar;
¿Quién es más capaz…
el que cierra los ojos con antojo
o el que desabrocha el cerrojo
y no mira para atrás?
JM Vereda 9/8/22
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